Blog dum gajo do Porto acerca de gaijas, actualidade política e sem futebol. Aqui o marmelo não gosta de futebol

segunda-feira, 26 de junho de 2006

Caso sério

Rita Lee - Roberto de Carvalho


Eu fico pensando em nós dois
Cada um na sua
Perdidos na cidade nua
Empapuçados de amor
Numa noite de verão
Ai, que coisa boa!
À meia-luz, a sós, a toa
Você e eu somos um
Caso sério
Ao som de um bolero
Dose dupla
Românticos de Cuba Libre
Mixto quente
Sanduíche de gente

domingo, 25 de junho de 2006

As mãos, essas traidoras, cheiram e sabem a sexo,
E o sexo, -esse deve saber – e cheirar – a sexo
Um fim-de-semana.

Poderíamos dizer que houve, ou houvera, ou tivera, ou fizera-se ….

Ninguém ia acreditar….

A Sónia, a outra e ainda aqueloutra e ainda a outra, que não era a outra mas que pareceria, se não se parecesse, ou fosse diferente, como a outra.

E a Lena, com o seu fulgor…

Ah!

È tudo isto real ou a sombra de uma realidade que é boa mas que não é?

após aquilo que ja sabemos

O sexo, os gatos e a orgia.

Os gatos, o sexo e a orgia,
orgiam como gatos no sexo

E os sexos, como os gatos, orgiam.

E são felizes.

Como os gatos são no sexo.

quinta-feira, 22 de junho de 2006

O desaparecido

Um dia, ele disse que ia ali à esquina comprar cigarros.
E desapareceu.
Não é força de expressão ou sentido figurado. Ele disse exactamente isto:

"Vou ali à esquina comprar cigarros "
... e ficou dez anos desaparecido.

Inesperadamente regressou....

Bateu à porta. A mulher foi abrir e lá estava ele.
Dez anos mais velho, mas era ele.

Quieto.Sem dizer uma palavra.

A mulher despejou toda a revolta contida durante o decénio:

- "Seu isto! Seu aquilo! Então dizes-me que vais comprar cigarros e desapareces? Abandonas-me, abandonas as crianças, ficas dez anos sem dar notícias e ainda tens o desplante, a falta de vergonha, a coragem de reaparecer assim, sem mais nem menos?
Vais-me me pagar.Fica sabendo que vais ouvir poucas e boas. Essa eu nunca te perdoarei. Estás a ouvir? Nunca! Entra, mas prepara-te para..."

Nisto, o homem dá uma palmada na testa e diz:

- ?F……-se!......... Esqueci-me dos fósforos....."

(autor desconhecido, recebida por e-mail)

quarta-feira, 14 de junho de 2006

Há muitas maneiras de amar,

Umas convencionais, outras menos convencionais, e algumas mesmo, mais ou menos, inconfessáveis.

Mas, de todas as maneiras que há de amar, mesmo nas mais inconfessáveis, há amor e isso basta.

Porque ao ser confessional, ou inconfesso ou até publico…

É sempre amor.

sábado, 10 de junho de 2006



"No-one ever told me I was pretty when I was a little girl. All little girls should be told they are pretty, even if they aren't."....

Marilyn Monroe.

Gragmento dum poema de Marilyn Monroe





I could have loved you once
and even said it
But you went away,
When you came back it was too late
And love was a forgotten word.
Remember?

Night of the Nite-soothing-
Darkness-refreshes-Air
Seems different-Night has
No eyes nor no one-Silence-
except to the Night itself

...

Marilyn



ORACIÓN POR MARILYN MONROE

Señor
recibe a esta muchacha conocida en toda la Tierra con el nombre de Marilyn Monroe,
aunque ése no era su verdadero nombre
(pero Tú conoces su verdadero nombre, el de la huerfanita violada a los 9 años
y la empleadita de tienda que a los 16 se había querido matar)
y que ahora se presenta ante Ti sin ningún maquillaje
sin su Agente de Prensa
sin fotógrafos y sin firmar autógrafos
sola como un astronauta frente a la noche espacial.
Ella soñó cuando niña que estaba desnuda en una iglesia (según cuenta el Times)
ante una multitud postrada, con las cabezas en el suelo
y tenía que caminar en puntillas para no pisar las cabezas.
Tú conoces nuestros sueños mejor que los psiquiatras.
Iglesia, casa, cueva, son la seguridad del seno materno
pero también algo más que eso...

Las cabezas son los admiradores, es claro
(la masa de cabezas en la oscuridad bajo el chorro de luz).
Pero el templo no son los estudios de la 20th Century-Fox.
El templo —de mármol y oro— es el templo de su cuerpo
en el que está el hijo de Hombre con un látigo en la mano
expulsando a los mercaderes de la 20th Century-Fox
que hicieron de Tu casa de oración una cueva de ladrones.
Señor
en este mundo contaminado de pecados y de radiactividad,
Tú no culparás tan sólo a una empleadita de tienda
que como toda empleadita de tienda soñó con ser estrella de cine.
Y su sueño fue realidad (pero como la realidad del tecnicolor).
Ella no hizo sino actuar según el script que le dimos,
el de nuestras propias vidas, y era un script absurdo.
Perdónala, Señor, y perdónanos a nosotros
por nuestra 20th Century
por esa Colosal Super-Producción en la que todos hemos trabajado.
Ella tenía hambre de amor y le ofrecimos tranquilizantes.
Para la tristeza de no ser santos
se le recomendó el Psicoanálisis.
Recuerda Señor su creciente pavor a la cámara
y el odio al maquillaje insistiendo en maquillarse en cada escena
y cómo se fue haciendo mayor el horror
y mayor la impuntualidad a los estudios.

Como toda empleadita de tienda
soñó ser estrella de cine.
Y su vida fue irreal como un sueño que un psiquiatra interpreta y archiva.

Sus romances fueron un beso con los ojos cerrados
que cuando se abren los ojos
se descubre que fue bajo reflectores
¡y se apagan los reflectores!
Y desmontan las dos paredes del aposento (era un set cinematográfico)
mientras el Director se aleja con su libreta
porque la escena ya fue tomada.
O como un viaje en yate, un beso en Singapur, un baile en Río
la recepción en la mansión del Duque y la Duquesa de Windsor
vistos en la salita del apartamento miserable.
La película terminó sin el beso final.
La hallaron muerta en su cama con la mano en el teléfono.
Y los detectives no supieron a quién iba a llamar.
Fue
como alguien que ha marcado el número de la única voz amiga
y oye tan solo la voz de un disco que le dice: WRONG NUMBER
O como alguien que herido por los gangsters
alarga la mano a un teléfono desconectado.

Señor:
quienquiera que haya sido el que ella iba a llamar
y no llamó (y tal vez no era nadie
o era Alguien cuyo número no está en el Directorio de los Ángeles)
¡contesta Tú al teléfono!




Ernesto Cardenal

Reabertura do baú


Reabertura do baú

As torres da Lapa e a Cooperativa dos Pedreiros

Jardins suspensos.

Jardins no céu. Pode-se lá estar em paz....

Sombra no estádio

sexta-feira, 9 de junho de 2006




Morreram todos.
E todas.
Como num campo de concentração, ou num genocídio.

Todos, quase sem excepção.

Que faço eu aqui?

Tudo!

Gracias a la vida, que me ha dado tanto.
Me dio dos luceros, que cuando los abro,
Perfecto distingo lo negro del blanco,
Y en el alto cielo su fondo estrellado,
Y en las multitudes el hombre que yo amo.

Gracias a la vida, que me ha dado tanto.
Me ha dado el oído que, en todo su ancho,
Graba noche y día grillos y canarios
Martillos, turbinas, ladridos, chubascos,
Y la voz tan tierna de mi bien amado.

Gracias a la vida, que me ha dado tanto,
Me ha dado el sonido y el abecedario.
Con él las palabras que pienso y declaro,
"Madre,", "amigo," "hermano," y los alumbrando
La ruta del alma del que estoy amando.

Gracias a la vida, que me ha dado tanto.
Me ha dado la marcha de mis pies cansados.
Con ellos anduve ciudades y charcos,
Playas y desiertos, montañas y llanos,
Y la casa tuya, tu calle y tu patio.

Gracias a la vida que me ha dado tanto
Me dio el corazón, que agita su marco.
Cuando miro el fruto del cerebro humano,
Cuando miro al bueno tan lejos del malo.
Cuando miro el fondo de tus ojos claros.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado la risa, y me ha dado el llanto.
Así yo distingo dicha de quebranto,
Los dos materiales que forman mi canto,
Y el canto de ustedes que es el mismo canto.

Y el canto de todos que es mi propio canto.
Gracias a la vida que me ha dado tanto
Amar. Amar perdidamente as serôdias paixões da meia-idade.
Para quem sente as serôdias paixões da meia-idade,
Para quem as sente.

É ridículo! Como ridículos são todos os sentimentos esdrúxulos,
Para quem não sente as serôdias paixões da meia-idade
Para quem não as sente.

E, como, só são ridículas as pessoas que não são esdrúxulas e não amam perdidamente.
Como quem não sente as serôdias paixões, da meia-idade.
E não podem sentir as tais serôdias paixões da meia-idade,
Fiquemo-nos, serôdios, pelas paixões da meia-idade, sentidas, esdrúxulas e sentidas
Depois de ouvir a Maria Callas e a Kire Te Kanava (é assim que se escreve?) a cantarem a área Mi Chiamano Mimi:

Um perfeita,
Perfeita a outra.

Uma com fífias,
A outra sem.

Porque prefiro a uma?

Porque diabos, ou caralhos, sempre que trocamos de carro nos sentimos traidores ?

Lá se safou....o pobre do Thesis.....

Hasta la vista! Adeus amigo....

O carro do Sousa em risco....

O quase agressor....

Para passar despercebido no meio dos outros...

Há coisas que demoram minutos a superar: uma pisadela no metro, um encontrão na baixa e uma cara feia que se cruza connosco.
Há coisas que demoram dias e dias a superar: uma notificação das finanças, uma batidela no carro e alguém que nos insulta na rua.
Ele há doidos para tudo.
E há coisas, pessoas e situações que demoram muito tempo a superar. Não há agora exemplos. Prudentemente.
É bom superar. Muito bom mesmo.
Seja a pisadela, a notificação ou o resto.

Como forma de exorcismo aqui vão as sábias palavras de Brel:

Bien sûr, nous eûmes des orages
Vingt ans d'amour, c'est l'amour fol
Mille fois tu pris ton bagage
Mille fois je pris mon envol
Et chaque meuble se souvient
Dans cette chambre sans berceau
Des éclats des vieilles tempêtes
Plus rien ne ressemblait à rien
Tu avais perdu le goût de l'eau
Et moi celui de la conquête.

E não sem resposta de Pedro Ayres Magalhães :

Má sorte,
foi amor que não retive,
e se calhar distrai-me...
- Qualquer coisa que encontrei.

Eu sei que é preciso uma lata bestial para fazer um post destes. E público num blog.

quinta-feira, 8 de junho de 2006


Tribunal de Guimarães absolve arguidos no caso dos atestados médicos

O Tribunal de Guimarães absolveu hoje, por falta de provas, os 14 médicos e os 16 estudantes das escolas secundárias Francisco de Holanda e Martins Sarmento que eram arguidos no caso dos atestados médicos apresentados para justicar faltas a exames.

segunda-feira, 5 de junho de 2006

Existe uma cabra dentro de cada uma de nós

Comparativamente aos homens somos umas grandes cabras!E não, não pensem que nos virámos e demos em machistas ou que ficámos doidas de vez! É sinceramente o que eu achamos e não nos excluímos deste leque...Somos vingativas e mesquinhas, quem nos faz uma paga-a com juros, eles ao contrário são mais pacíficos, ficam lixados, se estão mal mudam-se, deixam de falar à pessoa em questão, desprezam-na, mas raramente se vingam de algo.Nós seduzimos os namorados e maridos das amigas, eles são infieis a nós, mas são fieis aos amigos.Lutamos até à exaustão por aquilo que queremos sem olhar a meios, eles já ponderam os meios utilizados.E quando nos juntamos todas, ui...dizemos mal deles, congeminamos, gozamos e somos mesmo mazinhas.Gostamos de dar corda aos gajos, seduzi-los e quando estão no papo... xau aí!.
Por isto tudo e mais alguma coisa...somos cabras! E gostamos

Publicado no :
http://schwarzersamt.blog.com/

Estádio do Baovista no final do jogo Ucrania Holanda

sábado, 3 de junho de 2006

Affonso Romano de Sant'Anna

Intervalo amoroso

O que fazer entre um orgasmo e outro,
quando se abre um intervalo
sem teu corpo?

Onde estou, quando não estou
no teu gozo incluído?
Sou todo exílio?

...

Maria Tereza Horta

Anjos mulheres – VI

As mulheres voam
como os anjos:
Com as suas asas feitas
de cristal de rocha da memória

Disponíveis
para voar

soltas...

Primeiro
lentamente: uma por uma

Depois,
iguais aos passaros

fundas...

Nadando,
juntas

Secreta: a rasar o
chão

a rasar a fenda
da lua

no menstruo:
por entre a fenda das pernas

Às vezes é o aço
que se prende
na luz

A dobrarmos o espaço?

Bruxas:
pomos asas em vassouras
de vento

E voamos

Como as asas
lhe cresciam nas coxas

diziam dela:
que era um anjo do mar

Rondo alto,
postas em nudez de ombros
e pernas

perseguindo,

pelos espaços,
lunares
da menstruação

e corpo desavindo

Não somos violencia
mas o voo

quando nadamos
de costas pelo vento

até à foz do tempo
no oceano denso
da nossa própria voz

Sabemos distinguir
a dormir
os anjos das rosas voadoras

pelo tacto?

Somos os anjos
do destino

com a alma
pelo avesso
do útero

Voamos a lua
menstruadas

Os homens gritam:
– são as bruxas

As mulheres pensam:
– são os anjos

As crianças dizem:
– são as fadas

Fadas?

filigrama cintilante
de asas volteando
no fundo da vagina

Nadamos?

De costas,
no espaço deste século

Mudar o rumo
e as pernas mais ao
fundo

portas por trás
dobradas pelos rins

Abrindo o ar
com o corpo num só golpe

Soltas,
viando
até chegar ao fim

Dizem-nos:
que nos limitemos ao espaço

Mas nós voamos
também
debaixo de água

Nós somos os anjos
deste tempo

Astronautas,
voando na memória
nas galáxias do vento...

Temos um pacto
com aquilo que
voa

– as aves
da poesia

– os anjos
do sexo

– o orgasmo
dos sonhos

Não há nada
que a nossa voz não abra

Nós somos as bruxas da palavra

Cristiane Neder

Queria experimentar
todas as alturas do mundo
ao seu lado,
e perder o medo
de andar pelo céu

Carlos Drummond de Andrade

A moça mostrava a coxa

A moça mostrava a coxa,
a moça mostrava a nádega,
só não mostrava aquilo
– concha, berilo, esmeralda –
que se entreabre, quatrifólio,
e encerrra o gozo mais lauto,
aquela zona hiperbórea,
misto de mel e de asfalto,
porta hermética nos gonzos
de zonzos sentidos presos,
ara sem sangue de ofícios,
a moça não me mostrava.

...

Fernando Correia Pina

Serôdia paixão da meia idade

Serôdia paixão da meia-idade
me desbravou o peito insanamente
com uns olhos da cor da mocidade,
com uns lábios que beijei sofregamente.

O amor não escolhe tempo nem idade,
é doce mal que cresce de repente
e que a mim trouxe também a ansiedade
de na cama me mostrar incompetente.

Porém, estudei o caso em que envolvido
me achei, meio achado meio perdido
e tive a calma visão dos seus contornos –

era só questão de tempo ela encontrar
outro burro mais novo a quem se dar
deixando-me a roer um par de cornos...

Fernando Correia Pina

Depois de amar tão loucamente

Depois de te amar tão loucamente,
depois dessa paixão que me abrasou,
depois dessa tesão omnipotente
que os ossos do bom senso devorou,

achei-me um dia só, subitamente,
perguntando-me – agora onde é que vou
sem ninguém a quem amar intensamente,
sem ninguém a quem me dar tal como sou?

E a resposta não veio. Fiquei sozinho
afogando-me em desespero e vinho,
em tristes píveas, em anti-depressivos

e de ti, que hoje és apenas história,
guardo somente a saudosa memória
num pintelho entalado entre os incisivos.

António Aleixo

A biciclete

MOTE

Meu amor já veio de França,
Trouxe-me uma biciclete;
Ele diz que aquilo cansa,
Mas também não paga frete.

GLOSAS

No dia em que ele chegou
foi ao meu sítio passear,
P'ra me ver e p'ra mostrar
A lembrança que comprou.
Quando em minha casa entrou,
Eu vi a linda lembrança,
E assim me nasceu a esperança
De andar naquilo também...
Fui dizer à minha mãe:
Meu amor já veio de França.

"Se queres. monto-te agora..."
Montou-me, mas foi agoiro,
Aquilo deu logo um estoiro.
Ele disse: "Não demora."
Tirou a coisa p'ra fora,
Que noutra coisa se mete.
Deu seis sacadas ou sete,
E logo a roda se encheu.
Enfim, para andar mais eu
Trouxe-me uma biciclete...

Às vezes manda-me pôr
No quadro, à frente, e abala.
Depois é ele que pedala,
Mas entrega-me o guiador.
Já tenho dito: "Ai, amor,
Com que força isto avança."
Gosto de andar nesta dança,
Pois não pedalo, nem nada;
Eu vou muito descançada,
Ele diz que aquilo cansa.

....

Dá a surpresa de ser , do tio Fernando. O Pessoa claro

Dá a surpresa de ser.
É alta, de um louro escuro,
faz bem só pensar em ver
seu corpo meio maduro.

Seus seios altos parecem
(se ela estivesse deitada)
dois montinhos que amanhecem
sem ter que haver madrugada.

E a mão do seu braço branco
assenta em palmo espalhado
sobre a saliência do flanco
do seu relevo tapado.

Apetece como um barco.
Tem qualquer coisa de gnomo.
Meu Deus, qusndo é que eu embarco?
Ó fome, quando é que eu como?

Florbela Espanca

....

Meus pequeninos seios cor-de-rosa,
Se os roça ou prende a tua mão nervosa,
Têm a firmeza elástica dos gamos...

Para os teus beijos, sensual, flori!
E amendoeira em flor, só ofereço os ramos,
Só me exalto e sou linda para ti!

Natália Correia

Mocinhas gráceis...

Mocinhas gráceis, fungíveis
Mimosas de carne aérea
Que pela erecção dos centauros
Trepais como doida hera!
Por ardentes urdiduras
De Afrodite que abonais
Passais como queimaduras
E tudo em fogo deixais.´

....

Fernando Correia Pina

Fado da Serafina

Por trás ou pela frente, é indiferente.
Na boca ou entre as mamas, é trabalho
e a quem disser que gozo doidamente
o foda eternamente um bom caralho.

O leite que bebi azedou todo,
a carne que comi não soube a nada
e é sempre a mesma coisa quando fodo,
a ensossa fast-foda requentada.

Envelhecida, triste e sifilítica,
do bar de luxo fui para o passeio
e do passeio passei à beira-estrada

e hoje a cona me ralha apocalíptica -
pega por pega, antes foras política,
puta por puta, mil vezes deputada

recados do Alexandre O'Neill

Nos teus olhos altamente perigosos
vigora ainda o mais rigoroso amor
a luz dos ombros pura e a sombra
duma angústia já purificada

José Martí

Con la primavera
Viene la canción,
La tristeza dulce
Y el galante amor.

Con la primavera
Viene una ansiedad
De pájaro preso
Que quiere volar.

No hay cetro más noble
Que el de padecer:
Sólo un rey existe:
El muerto es el rey.

poesias várias

Es rubia: el cabello suelto
Da más luz al ojo moro:
Voy, desde entonces, envuelto
En un torbellino de oro.
La abeja estival que zumba
Más ágil por la flor nueva,
No dice, como antes, "tumba":
"Eva" dice: todo es "Eva".

José Martí

A única rainha da noite: Maria Callas! E traduzido...




Der Hölle Rache kocht in meinem Herzen, Hells Revenge cooks in my heart,
Tot und Verzweiflung flammet um mich her! Death and despair flame about me!
Fühlt nicht durch dich Sarastro If Sarastro does not through you feel
Todesschmerzen, The pain of death,
So bist du meine Tochter nimmermehr. Then you will be my daughter nevermore.
Verstossen sei auf ewig, Disowned may you be forever,
Verlassen sei auf ewig, Abandoned may you be forever,
Zertrümmert sei'n auf ewig Destroyed be forever
Alle Bande der Natur All the bonds of nature,
Wenn nicht durch dich If not through you
Sarastro wird erblassen! Sarastro becomes pale! (as death)
Hört, Rachegötter, Hear, Gods of Revenge,
Hoert der Mutter Schwur! Hear a mother's oath!

mais recados

Uma tradução para Inglês da área Si, Mi Chiamano Mimi de la Boheme….



Mimì
Yes, they always called Mimi,
but my real name is Lucia.
This story of mine is brief:
To linen and silk I embroider,
at my home or away...
I have a quiet, but happy life,
and my pastime
is making lilies and roses.
I delight in these pleasures.
These things have such sweet charm,
they speak of love, of Spring,
of dreams and visions and
the things that have poetic names.
Are you understanding me?

Rodolfo
Yes.

Mimì
They always call me Mimi,
I know not why!
All alone
I make myself dinner.
I don't attend mass often,
but I pray to the Lord frequently.
I live by myself, all alone,
in my little white room.
I look upon the roofs and the sky.
But when the thaw comes,
the first warmth of the sun is mine,
the first kiss of April is mine!
In a vase a Rosebud blooms,
I watch as petal by petal unfolds,
with its delicate fragrance of a flower!
But the flowers that I sew,
alas, have no fragrance.
There's nothing more
I can tell you about myself.
I am your neighbour, who knocks
at your door so late disturbing
you at inopportune moment.

mais recados tio Eça para o A, dos Maias

E o seu gesto mole e acariciador indicava a Toca, a quietação dos arvoredos, a beleza de Maria. Depois na sala, enquanto Maria tocava um nocturno de Chopin e Carlos e ele acabavam os charutos à porta do jardim vendo nascer a lua - Ega declarou que, desde o começo do jantar, estava com ideias de casar!... Realmente não havia nada como o casamento, o interior, o ninho...
- Quando penso, menino, murmurou ele mordendo sombriamente o charuto, que quasi todo um ano da minha vida foi dado àquela israelita devassa que gosta de levar bordoada...
- Que faz ela em Sintra? perguntou Carlos.
- Ensopa-se na crápula. Não há a menor dúvida que dá todo o seu coração ao Dâmaso... Tu sabes o que nestes casos significa o termo coração... Viste já imundície igual? É simplesmente obscena!
- E tu adora-la, disse Carlos.
O outro não respondeu. Depois, dentro, num ódio repentino da boémia e do romantismo, entoou louvores sonoros à família, ao trabalho, aos altos deveres humanos - bebendo copinhos de cognac. Á meia noite, ao sair, tropeçou duas vezes na rua de acácias, já vago, citando Proudhon. E quando Carlos o ajudou a subir para a vitória, que ele quis descoberta para ir comunicado com a lua, Ega ainda lhe agarrou o braço para lhe falar da Revista, dum forte vento de espiritualidade e de virtude viril que se devia fazer soprar sobre o país... Por fim, já estirado no assento, tirando o chapéu à aragem da noite:
- E outra coisa, Carlinhos. Vê se me arranjas a inglesa... Há vícios deliciosos naquelas pestanas baixas... Vê se ma arranjas... Vá lá, bate lá, cocheiro! Caramba, que beleza de noite!

ao A para ler e meditar. Recado do Eça, nos Maias

Carlos não respondeu. Examinava outra vez o bilhete: o homem chamava-se Joaquim Alvares de Castro Gomes: por baixo tinha escrito a lápis «Hotel Bragança»... Baptista voltara com a sobrecasaca: e Carlos, abotoando-a devagar, saiu sem outra mais palavra ao Ega, que ficara de pé junto da mesa, limpando estupidamente as mãos ao guardanapo.
No salão nobre, forrado de brocados cor de musgo de outono, Castro Gomes examinava curiosamente, com um joelho apoiado à borda do sofá, a esplêndida tela de Constable, o retrato da condessa de Runa, bela e forte no seu vestido de veludo escarlate de caçadora inglesa. Ao rumor dos passos de Carlos sobre o tapete, voltou-se, de chapéu branco na mão, sorrindo, pedindo perdão de estar assim a pasmar familiarmente para aquele soberbo Constable... Com um gesto rígido, Carlos, muito pálido, indicou-lhe o sofá. Saudando e risonho Castro Gomes sentou-se vagarosamente. No peito da sobrecasaca muito justa trazia um botão de rosas, os seus sapatos de verniz resplandeciam sob as polainas de linho; no rosto chupado, queimado, a barba negra, terminava em bico; os cabelos rareavam-lhe na risca; e mesmo a sorrir tinha um ar de secura, de fadiga.
- Eu possuo também em Paris um Constable muito chic, disse ele, sem embaraço, num tom arrastado, cheio de rr, que o sotaque brasileiro adocicava. Mas é apenas uma pequena paisagem, com duas figurinhas. É um pintor que não me diverte, a dizer a verdade... Todavia da muito tom a uma galeria. É necessário te-lo.
Carlos, defronte numa cadeira, com os punhos fortemente fechados sobre os joelhos, conservava a imobilidade dum mármore. E, perante aquele modo afável, uma ideia ia-o atravessando, lacerante, angustiosa, pondo-lhe já nos olhos largos que não tirava de sobre o outro, uma irreprimivel chama de cólera. Carlos Gomes decerto não sabia nada! chegara, desembarcara, correra aos Olivais, dormira nos Olivais! Era o marido, era novo, tivera-a já nos braços - a ela! E agora ali estava, tranquilo, de flor ao peito, falando de Constable! O único desejo de Carlos, nesse instante, era que aquele homem o insultasse.
No entanto Castro Gomes, amavelmente, desculpava-se de se apresentar assim, sem o conhecer, sem ao menos ter pedido por um bilhete uma entrevista...
- O motivo porém que me traz é tão urgente, que cheguei esta manhã ás dez horas do Rio de Janeiro, ou antes do Lazareto, e estou aqui!... E esta mesma noite, se puder, parto para Madrid.
Fez-se um alívio infinito no coração de Carlos. Ainda não vira então Maria Eduarda, aqueles secos lábios não a tinham tocado! E saiu enfim da sua rigidez de mármore, teve um movimento atento, aproximando de leve a cadeira.
Castro Gomes no entanto, tendo pousado o chapéu, tirara do bolso interior da sobrecasaca uma carteira com um largo monograma de ouro; e, vagaroso, procurava entre os papéis uma carta... Depois, com ela na mão, muito tranquilamente:
- Eu recebi no Rio de Janeiro, antes de partir, este escrito anónimo... Mas não creia V. Exc.ª que foi ele que me levou a atravessar à pressa o Atlântico. Seria o maior dos ridículos... E desejo também afirmar-lhe que todo o conteúdo dele me deixou perfeitamente indiferente... Aqui o tem. Quer V. Exc.ª lê-lo, ou quer que eu leia?
Carlos murmurou com um esforço:
- Leia V. Exc.ª
Castro Gomes desdobrou o papel, e revirou-o um instante entre os dedos.
- Como V. Exc.ª vê, é a carta anónima em todo o seu horror: papel de mercearia, pautadinho de azul; caligrafia reles; tinta reles; cheiro reles. Um documento odioso. E aqui está como ele se exprime: «Um homem «que teve a honra de apertar a mão de V. Exc.ª» Eu dispensava a honra... «que teve a hora de apertar a mão de V. Exc.ª e de apreciar o seu «cavalheirismo, julga dever preveni-lo que sua mulher é, à vista de toda a «Lisboa, a amante dum rapaz muito conhecido aqui, Carlos Eduardo da «Maia, que vive numa casa ás Janelas Verdes, chamada o Ramalhete. Este «herói, que é muito rico, comprou expressamente uma quinta nos Olivais, «onde instalou a mulher de V. Exc.ª e onde a vai ver todos os dias, ficando «ás vezes, com escândalo da vizinhança, até de madrugada. Assim o nome «honrado de V. Exc.ª anda pelas lamas da capital.» É tudo o que diz a carta; e eu só devo acrescentar, porque o sei, que tudo quanto ela diz é incontestavelmente exacto... O Sr. Carlos da Maia é pois publicamente, com conhecimento de toda a Lisboa, o amante dessa senhora.
Carlos ergueu-se, muito sereno. E abrindo de leve os braços, numa aceitação inteira de todas as responsabilidades:
- Não tenho então nada a dizer a V. Exc.ª senão que estou ás suas ordens!...
Uma fugitiva onda de sangue avivou a palidez morena de Castro Gomes. Dobrou a carta, guardou-a com todo o vagar na carteira. Depois, sorrindo friamente:
- Perdão... O Sr. Carlos da Maia sabe, tão bem como eu, que se isto tivesse de ter uma solução, violenta, eu não viria aqui pessoalmente, a sua casa, ler-lhe este papel... A coisa é inteiramente outra.
Carlos recaíra na cadeira, assombrado. E agora a lentidão adocicada daquela voz ia-se-lhe tornando intolerável. Um confuso terror do que viria desses lábios, que sorriam com uma palidez impertinente, quasi fazia estalar o seu pobre coração. E era um desejo brutal de lhe gritar que acabasse, que o matasse, ou que saísse daquela sala, onde a sua presença era uma inutilidade ou uma torpeza!...
O outro passou os dedos no bigode, e prosseguiu, devagar, arranjando as suas palavras com cuidado e com precisão:
- O meu caso é este, Sr. Carlos da Maia. Há pessoas em Lisboa que me não conhecem decerto, mas que sabem a esta hora que existe algures, em Paris, no Brasil ou no inferno, um certo Castro Gomes, que tem uma mulher bonita, e que a mulher desse Castro Gomes tem em Lisboa um amante. Isto é desagradável, sobretudo por ser falso. E V. Exc.ª compreende que eu não devo continuar a arrastar por mais tempo a fama de marido infeliz, visto que a não mereço, e que a não posso legalmente ter... É por isso que aqui venho, muito francamente, de gentleman para gentleman, dizer-lhe, como tenho intenção de dizer a outros, que aquela senhora não é minha mulher.
Durante um momento Castro Gomes esperou a voz de Carlos da Maia. Mas ele conservava uma face muda, impenetrável, onde apenas os olhos brilhavam angustiosamente na lívidez que a cobrira. Por fim, com um esforço, baixou de leve a cabeça, como acolhendo placidamente aquela revelação, que tornava outra qualquer palavra entre eles desnecessária e vã.
Mas Castro Gomes encolhera de leve os ombros, com uma lânguida resignação, como quem atribue tudo à malícia dos Destinos.
- São as ridículas cenas da vida... O Sr. Carlos da Maia está daí a ver as coisas. É a velha, a clássica história... Há três anos que eu vivo com essa senhora; quando tive o inverno passado de ir ao Brasil, trouxe-a a Lisboa para não vir sozinho. Fomos para o hotel Central. V. Exc.ª compreende perfeitamente que eu não fui fazer confidências ao gerente do estabelecimento. Aquela senhora vinha comigo, dormia comigo, portanto, para todos os efeitos do hotel, era minha mulher. Como mulher de Castro Gomes ficou no Central; como mulher de Castro Gomes alugou depois uma casa na rua de S. Francisco; como mulher de Castro Gomes tomou enfim um amante... Deu-se sempre como mulher de Castro Gomes, mesmo nas circunstâncias mais particularmente desagradáveis para Castro Gomes... E, meu Deus! não podemos realmente condena-la muito... Achava-se por acaso revestida duma excelente posição social e dum nome puro, seria mais que humano que o seu amor da verdade a levasse, apenas conhecia alguém, a declarar que posição e nome eram de empréstimo e ela era apenas «Fulana de tal, amigada...» De resto, sejamos justos, ela não era moralmente obrigada a dar semelhantes explicações ao tendeiro que lhe vendia a manteiga, ou à matrona que lhe alugava a casa: nem mesmo, penso eu, a ninguém, a não ser a um pai que lhe quisesse apresentar sua filha, saída do convento... Demais a mais sou eu que tenho um pouco a culpa; muitas vezes, em coisas relativamente delicadas lhe deixei usar o meu nome. Foi, por exemplo, com o nome de Castro Gomes que ela tomou a governante inglesa. As inglesas são tão exigentes!... Aquela, sobretudo, uma rapariga tão séria... Enfim tudo isso passou... O que importa agora é que eu lhe retiro solenemente o nome que lhe emprestara; e ela fica apenas com o seu, que é Madame Mac-Gren.
Carlos ergueu-se, lívido. E com as mãos fincadas nas costas da cadeira tão fortemente, que quasi lhe esgaçava o estofo:
- Mais nada, creio eu?
Castro Gomes mordeu de leve os beiços perante este remate brutal que o despediu.
- Mais nada, disse ele tomando o chapéu e levantando-se muito vagarosamente. Devo apenas acrescentar, para evitar a V. Exc.ª suspeitas injustas, que aquela senhora não é uma menina que eu tivesse seduzido, e a quem recuse uma reparação. A pequerruchinha que ali anda não é minha filha... Eu conheço a mãe somente há três anos... Vinha dos braços dum qualquer, passou para os meus... Posso pois dizer, sem injuria, que era uma mulher que eu pagava.

continuação dos males de amor....

Dizem que finjo ou minto

Tudo que escrevo. Não.

Eu simplesmente sinto

Com a imaginação.

Não uso o coração.



Tudo o que sonho ou passo,

O que me falha ou finda,

É como que um terraço

Sobre outra coisa ainda.

Essa coisa é que é linda.



Por isso escrevo em meio

Do que não está ao pé,

Livre do meu enleio,

Sério do que não é.

Sentir? Sinta quem lê!

aos males de amores

Meu coração é uma barca

Que não sabe navegar

A quem sabe o que lhe vai na alma

Vinha elegante, depressa,
Sem pressa e com um sorriso.
E eu, que sinto co a cabeça,
Fiz logo o poema preciso.
No poema não falo dela
Nem como, adulta menina,
Virava a esquina daquela
Rua que é a eterna esquina...
No poema falo do mar,
Descrevo a onda e a mágoa.
Relê-lo faz-me lembrar
Da esquina dura - ou da água.

Vinha elegante, depressa, (14-8-1932)

sexta-feira, 2 de junho de 2006

A volta do Sousa

Se há coisa que nunca percebi é a bondade intrínseca que há nas religiões.
È certo que sou mais ou menos ateu, graças a Deus – muitas, com Deus poucas - , e que a questão religiosa nunca me tocou muito.
Baptizado ainda sem consciência, não fiz a comunhão ou o Crisma.
Dava um post engraçado saber porque não. A seu tempo.
Da parte mais ou menos cripto-judaica da minha família pouco conhecimento tenho.
Eu estou fartíssimo de saber que o senso comum é o maior inimigo da ciência.
Quantas vezes ele nos engana.
Temos Kant, e outros pândegos para nos orientarem. Até temos os mestres da suspeita, como o próprio nome indica , a suspeitarem de tudo.
Agora, como no sexo e a cidade, pergunto a mim mesmo:

A religiosidade, seja isso o que for, melhora o comportamento das pessoas ?

Ser religioso torna uma pessoa melhor ?

Em próximos posts espero discutir isto

A ausência do Sousa deve-se a razões pessoais….

Ahhhh a Lancia faz carros muito bons…..

A sério vejam…: http://www.lanciathesis.com/eng/home.html

O Sousa